Luego que la multitud escuchara sus palabras de vida, muchos creyeron en él y anhelaban seguir oyéndole, esto lo veremos a continuación así como el bello pasaje que nos muestra que "Él vino a salvar a los perdidos " ¡Aleluya!
La
mujer adultera
53 Cada uno se fue a su casa;
2 Y por la mañana
volvió al
templo,
y todo el pueblo vino a él; y sentado él, les
enseñaba.
3 Entonces los escribas
y los fariseos le trajeron una mujer sorprendida en adulterio; y poniéndola en
medio,
4 le dijeron: Maestro, esta mujer ha sido sorprendida
en el acto mismo de adulterio.
5 Y en la ley nos mandó Moisés apedrear a
tales mujeres. Tú, pues, ¿qué dices?
6 Mas esto decían
tentándole, para poder acusarle. Pero Jesús, inclinado hacia el suelo, escribía
en tierra con el dedo.
7 Y como insistieran en
preguntarle, se enderezó y les dijo: El que de vosotros esté sin pecado sea el
primero en arrojar la piedra contra ella.
8 E inclinándose de nuevo hacia el suelo, siguió escribiendo en tierra.
8 E inclinándose de nuevo hacia el suelo, siguió escribiendo en tierra.
9 Pero ellos, al oír
esto, acusados por su conciencia, salían uno a uno, comenzando desde los más
viejos hasta los postreros; y quedó solo Jesús, y la mujer que estaba en medio.
10 Enderezándose Jesús, y
no viendo a nadie sino a la mujer, le dijo: Mujer, ¿dónde están los que te acusaban? ¿Ninguno te condenó?
11 Ella dijo: Ninguno, Señor.