Los convidados a las
bodas
7 Observando cómo escogían los primeros asientos a la
mesa, refirió a los convidados una parábola, diciéndoles:
8 Cuando fueres convidado por alguno a
bodas, no te sientes en el primer lugar, no sea que otro más distinguido que tú
esté convidado por él,
9 y viniendo el que te convidó a ti y a él, te diga: Da lugar a éste; y entonces
comiences con verguenza a ocupar el último lugar.
10Mas cuando fueres
convidado, ve y siéntate en el último lugar, para que cuando venga el que te
convidó, te diga: Amigo, sube más arriba; entonces tendrás gloria delante de los que se sientan contigo a la
mesa.
11Porque
cualquiera que se enaltece, será humillado; y el que se humilla, será
enaltecido.
12 Dijo también al que le había convidado: Cuando hagas comida o
cena,
no llames a tus amigos, ni a tus hermanos, ni a tus parientes, ni a
vecinos ricos; no sea que ellos a su vez te vuelvan a convidar, y seas
recompensado.
13 Mas cuando hagas banquete,
llama a los pobres,
los mancos, los cojos...
...y los ciegos;
llama a los pobres,
los mancos, los cojos...
...y los ciegos;
14 y serás bienaventurado; porque
ellos no te pueden recompensar, pero te será recompensado en la resurrección de
los justos."
(Las Buenas Nuevas de nuestro Señor Jesucristo, revelada a su iglesia a través del maravilloso Espíritu Santo
1 Juan 2:6