Parábola de la semilla de mostaza
(Mt. 13.31-32; Mr. 4.30-32)
que un hombre tomó
y sembró en su huerto;
y creció,...
...y se hizo árbol grande,
y las aves del cielo anidaron en sus ramas.
(Las Buenas Nuevas de nuestro Señor Jesucristo, revelada a su iglesia a través del maravilloso Espíritu Santo
Lucas, capítulo 13, versículos del 18 al 21 Reina-Valera 1960)
“La semilla de mostaza es la palabra de Dios, ¡Poderosa! ¡Viva! Pues la palabra es ¡CRISTO JESÚS! Él es el verbo de Dios, cada vez que la leemos impartimos la vida de Cristo en nuestro ser, y vamos creciendo en fe, en perseverancia, en AMOR, en los frutos del Espíritu. Y él nos lo dijo: "Yo he venido a dar VIDA, y VIDA EN ABUNDANCIA"