1Júzgame, oh Dios,
y defiende mi causa;
Líbrame de gente impía,
y del hombre engañoso e inicuo.
2
2 Pues que tú eres el Dios
de mi fortaleza,
¿por qué me has desechado?
¿Por qué andaré enlutado
por la opresión del enemigo?
4
4 Entraré al altar de Dios,
Al Dios de mi alegría y de mi gozo;
oh Dios, Dios mío.
5 ¿Por qué te abates, oh alma mía,
Y por qué te turbas dentro de mí?
Espera en Dios;
porque aún he de alabarle,