Los endemoniados gadarenos
28 Cuando llegó a la otra orilla, a la tierra de los gadarenos,
...vinieron a su encuentro dos endemoniados (*) que salían de los sepulcros, feroces en gran manera, tanto que nadie podía pasar por aquel camino.
29 Y clamaron diciendo: ¿Qué tienes con nosotros, Jesús, Hijo de Dios? ¿Has venido acá para atormentarnos antes de tiempo?
30 Estaba paciendo lejos de ellos un hato de muchos cerdos.
31 Y los demonios le rogaron diciendo: Si nos echas fuera, permítenos ir a aquel hato de cerdos.
32 El les dijo: Id.
Y ellos salieron, (*)
y he aquí, todo el hato de cerdos se precipitó en el mar por un despeñadero,
Y ellos salieron, (*)
...y perecieron en las aguas.
33 Y los que los apacentaban huyeron, y viniendo a la ciudad, contaron todas las cosas, y lo que había pasado con los endemoniados.
34 Y toda la ciudad salió al encuentro de Jesús; y cuando le vieron, le rogaron que se fuera de sus contornos.
( Evangelio del Señor Jesucristo, escrito por el apostol Mateo, capítulo 8 versículos 28- 34 Reina Valera 60. )
Notas:
(*)Endemoniados:“Este pasaje
nos muestra unos de los ataques más despiadados de los demonios a la vida de
los seres humanos: la posesión demoniaca. En el Nuevo Testamento vemos varios
casos de posesión demoniaca, pero este en específico nos muestra un claro
cuadro de la terrible condición a la que los demonios pueden arrastrar a una
persona. La mención de demonios confirma la realidad de fuerzas espirituales
poderosas en el universo. Las Sagradas Escrituras tienen mucho que decir con
respecto a ángeles y demonios. El termino, que tanto en hebreo malák
(מַלְאָךְ) y griego ángelos (ἄγγελος), significa mensajero, y se aplica generalmente a seres sobrenaturales y
celestiales cuyo ministerio es actuar como mensajeros y agentes de Dios en la
realización de la voluntad divina y son superiores a los seres humanos. De
acuerdo a la Biblia estos fueron creados por Dios: “Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en
los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean
dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y
para él”, (Colosenses
1:16), y fueron creados antes que el hombre: “¿Sobre qué
están fundadas sus bases? ¿O quién puso su piedra angular, Job 38:7 Cuando alababan todas las estrellas del alba, Y
se regocijaban todos los hijos de Dios?” (Job 38:6-7).
“… La Biblia nos
dice que son miles de ellos: “sino que os habéis acercado al monte de Sion, a la ciudad
del Dios vivo, Jerusalén la celestial, a la compañía de muchos millares de
ángeles”, (Hebreos 12:22), “Después de
esto oí una gran voz de gran multitud en el cielo, que decía: ¡Aleluya!
Salvación y honra y gloria y poder son del Señor Dios nuestro”, (Apocalipsis 19:1).
Sin embargo,
también la Escrituras nos hablan de ángeles que pecaron: “Y a los
ángeles que no guardaron su dignidad, sino que abandonaron su propia morada,
los ha guardado bajo oscuridad, en prisiones eternas, para el juicio del gran
día”, (Judas 6) y estos son los demonios.
La palabra demonio proviene del
griego daimonion (δαιμόνιον) y se les consideraba espíritus malos. En el pensamiento judío
tardío los demonios aparecen más explícitamente como seductores de los hombres
y enemigos de Dios…”
(*) "...y ellos salieron": “…Inmediatamente cuando los endemoniados ven a Jesús corren a Él. El evangelio según Marcos agrega que no solo corrieron a Él, sino que también se arrodillaron (Marcos 5:6). Al estar ante la presencia del Mesías exclamaron: ¿Qué tienes con nosotros, Jesús, Hijo de Dios? ¿Has venido acá para atormentarnos antes de tiempo? mostrándonos que los demonios reconocieron a Jesús como Dios. Esto no es de extrañarse, ya que como seres espirituales que un día le sirvieron a Dios, lo conocen perfectamente, tal y como lo declara Santiago: “Tú crees que Dios es uno; bien haces. También los demonios creen, y tiemblan”, (Santiago 2:19). Se pudiera pensar en por qué estos endemoniados no huyeron de la presencia de Jesús. Por qué corrieron directamente hacia Él y no lo atacaron, sino que se arrodillaron reconociendo su señorío. Obviamente los demonios entendieron que no había forma de escapar del Jesús ya que se trataba del mismo Dios y decidieron mejor pedir misericordia. Sus palabras: ¿Has venido acá para atormentarnos antes de tiempo?, nos muestran que ellos están conscientes del juicio venidero que les espera, tanto a ellos como a su líder Satanás."
(fuente: Mundo Bíblico El Estudio de Su Palabra)
(*) "...y ellos salieron": “…Inmediatamente cuando los endemoniados ven a Jesús corren a Él. El evangelio según Marcos agrega que no solo corrieron a Él, sino que también se arrodillaron (Marcos 5:6). Al estar ante la presencia del Mesías exclamaron: ¿Qué tienes con nosotros, Jesús, Hijo de Dios? ¿Has venido acá para atormentarnos antes de tiempo? mostrándonos que los demonios reconocieron a Jesús como Dios. Esto no es de extrañarse, ya que como seres espirituales que un día le sirvieron a Dios, lo conocen perfectamente, tal y como lo declara Santiago: “Tú crees que Dios es uno; bien haces. También los demonios creen, y tiemblan”, (Santiago 2:19). Se pudiera pensar en por qué estos endemoniados no huyeron de la presencia de Jesús. Por qué corrieron directamente hacia Él y no lo atacaron, sino que se arrodillaron reconociendo su señorío. Obviamente los demonios entendieron que no había forma de escapar del Jesús ya que se trataba del mismo Dios y decidieron mejor pedir misericordia. Sus palabras: ¿Has venido acá para atormentarnos antes de tiempo?, nos muestran que ellos están conscientes del juicio venidero que les espera, tanto a ellos como a su líder Satanás."
(fuente: Mundo Bíblico El Estudio de Su Palabra)